miércoles, 2 de septiembre de 2009

noches en el porche

Las noches aquí dentro hacen que mi cabeza se desespere
voy a salir al porche, a que me mimen los cojines gigantes
y mi pequeño gatito.

Arrepentirnos no sirve de nada, creo yo
y lo que te hice en el parque también me duele a mí,
con una pequeña herida en la palma de la mano
te digo lo que jamás te diré, nada, quizá.

Necesito esa foto que jamás ví
necesito la verdad.

que loca estoy, moriré
sentada en el porche

pero tu tranquilo, que yo te espero aquí.
disfrutando de los veranos que huelen a hierbabuena y las noches
en las que me gustaría tomar el té contigo mientras te toco el pelo
o te digo secretos al oído.




pero ya me quedo quieta.
totalmente quieta.
miau.

Como empezar un dia

recordando las noches

He intentado levantarme varias veces de esta cama anaranjada
pero el aire que me traían las cortinas no me dejaba incorporarme...

!que dolor de vida tenía¡
he conseguido vomitar todo lo malo
y cuando creía que por fin acabó,
me quedaban unas cuantas cosas terribles en un rinconcito
y también las eché de una forma muy brusca ya que no querían separarse de mi,
!las muy babosas¡.

Y ya pude hablar bien...
vocalizar pequeñas palabritas
y pasitos tranquilos que consiguieron
llenar mi cabeza de otros sonidos y otros pensamientos menos desordenados.

Conseguí salir a la puerta de casa, muy lentamente, y el sol daba fuerte,
los colores chillaban como nunca, era desagradable, pero no enfermizo.
Para mi sorpresa la noche anterior llegó a mis ojos, "Lofti", el carpintero árabe estaba en casa y me sonreía, mientras colocaba las estanterías de la nueva biblioteca .

Hacía horas que Elé había salido de mi habitación, y yo, nada más abrir los ojos en la cama, ya lo percibí, dejando tras de sí una notita, que me recordó a los abrazos de hace solo unas horas, cuando el sol aún no había nacido, los colores, no dolían tanto como ahora, y mi cara era un terrible poema.