lunes, 19 de noviembre de 2018

Huracán

Busca lo que más brille.
Disfruta de tu soledad, que no es soledad, que es tu vida al fin y al cabo.
Tres días que son como el centro de un pequeño huracán, pero lento… se mueve despacio no te deja ver nada y te balancea.
Suspiras, respiras e intentas pensar que no pasa nada.
Y no lo pasa, antes de ti había millones de otras cosas, pero llegaste como causa mágica al destino.
Me preguntaste “¿cómo estás?” Y ahí el huracán se aceleró, no tenía freno, lágrimas brotaban desde mi estómago y te vi, sonriente como siempre, y tus ojos me abrazaron y el alma se me rompió.